Durante nuestra trayectoria hemos colaborado con compañías nacionales y extranjeras que nos han permitido guiarlos en el camino a consolidarse como un referente en su ramo.
“Se vino pandemia, fue difícil, sino hubiera sido por ustedes por supuesto que ya hubiéramos cerrado”.
Antes no tenia una forma para dirigir y lograr las metas que planteaba, ahora somos una empresa que tiene bien definidos los objetivos que la empresa debe buscar y los medios para alcanzarlos».
“Definitivamente ha habido un cambio, el control que llevamos es mucho más organizado, fiable. He aprendido a interpretar la información y tomar decisiones con eso. Las ventas han mejorado considerablemente”.
“Antes estábamos jugando al empresario, la empresa no tenia ni pies ni cabeza, ahora ya tengo registros, indicadores, estructura y mucho más orden”.
El entrenamiento que he estado trabajando con Daniel me ayuda a avanzar en todos mis proyectos. También recibo retroalimentación y aplicamos distintas estrategias para hacer que el plan funcione. De verdad se lo recomendaría a cualquiera que quiera mejores resultados.
El entrenamiento ha sido clarificado, demandante, práctico, decisivo y una guía que me muestra los caminos que necesito recorrer, cuáles no necesito recorrer y las opciones de crecimiento que más favorables son para el proyecto a futuro que estoy construyendo.
Ha sido de utilidad la orientación y el acompañamiento de ustedes, hacia mi empresa ya que actualmente cuento con una estructura, identifique mis debilidades y aumente mis fortalezas. Así mismo la toma de decisiones es diferente y mi empresa empieza a trabajar sin mi.
He aprendido a descubrir habilidades que no sabía que poseía y a desarrollar muchas otras que han impulsado mi crecimiento y el de mi empresa. Mi coach, Daniel, me ayuda semana a semana a mantenerme enfocada sobre un objetivo, me ayuda a analizar los avances o retrocesos y a encontrar soluciones y aplicarlas. Creo que sin su ayuda, mi empresa no tendría el crecimiento que hemos logrado, ni la visión que me ha ayudado a crear.
El tener un negocio requiere de orden, de sistemas para administrar todo lo que tenemos, cosa que yo no lo estaba llevando a cabo de la manera correcta he aprendido a llevar esos controles para poder tomar decisiones que anteriormente no podía. También me ha permitido ver en qué se gastan los recursos y dónde optimizarlos.
El coaching ha cambiado poco a poco esa perspectiva que tengo. Me he dado cuenta de que dirijo una empresa. Para seguir, me he dado cuenta de que dirijo un grupo de personas. Quizá no ha habido una sesión especial en la que Abimael me explique: “Mira, tú eres la cabeza, y así debe actuar la cabeza”, pero sí he visto que hay cosas que deben hacerse, pero que no me toca a mí hacerlas.